¿ES BÍBLICA LA SANIDAD INTERIOR?

        Creo que no debe existir hoy una sola congregación evangélica que no cuente, entre sus ministerios, departamentos o comisiones, una dedicada a la sanidad interior de los hermanos. Los más viejos no paran de preguntar de qué se trata eso, mientras añaden que en sus tiempos ni se hablaba del asunto, sólo se hablaba de Jesucristo.

     

   El caso es que a medida que pasan los tiempos, esa área va tomando más y más popularidad y, si las cosas se hacen bien, también prestigio. Tanto que en muchas iglesias de las más ricas intelectualmente, ya se incentiva a los jóvenes a estudiar psicología con la finalidad de utilizarlos luego en esas sanidades.

       Algunos la defienden a ultranza y otros se oponen tenaz y ferozmente. Creo que lo uno y lo otro es desmedido. No es la prioridad de la iglesia del Señor, (La plenitud en el Espíritu Santo sí lo es), pero tampoco resulta innecesaria conforme al estado interior que se encuentra una gran mayoría de cristianos.

        Por lo tanto, y en función y razón de esclarecer algunos conceptos básicos, y sin tomar partido por ninguno de los sectores en disputa santa, quiero referirme en este trabajo a ciertos pormenores que fastidian las vidas de los hombres, que como todos sabemos son tan tripartitos como el Dios que los creó: Espíritu, Alma y Cuerpo. La sanidad interior, eso se sabe, tiene que ver básicamente con uno de estos elementos, el alma.

        Cuando hablamos del alma, lo primero que debemos hacer, es definirla como la voluntad que decide. Allí se encuentra todo. ¿Qué elementos encontramos básicamente en el alma?  En principio, el alma es la que nos da conciencia de nosotros mismos, de lo que somos. Es algo así como la sede central de nuestra personalidad. Allí están los elementos que nos hacen humanos. Intelecto, Ideales, Amor, Emoción, la capacidad de elegir, la decisión. Todas esas virtudes se encuentran en el alma.

        No existe una relación directa entre un proceso creativo de Dios sobre el alma. Lo que podemos ver por la palabra, es que el fenómeno que se dio, fue este: que Dios tomó y modeló el cuerpo en base a la tierra, como dice del cuerpo de Adán, y sopló aliento de vida. Y en ese momento, para poder vincular algo que es espíritu con algo que es materia, se genera el alma para poder hacer este enlace.

      

  Revisando los originales, no hay referencia donde diga que Dios ha creado específicamente el alma. Pero tenemos alma, esto es notorio, nadie lo discute. Bien; eso es lo que veremos si se puede aclarar en este trabajo. Veamos el libro de Génesis, capítulo 12.

(Génesis 12: 5) = Tomó, pues, Abram a Sarai su mujer, y a Lot hijo de su hermano, y todos sus bienes que habían ganado y las personas (En algunas versiones dice almas)que habían adquirido en harán, y salieron para ir a tierra de Canaán; y a tierra de Canaán llegaron.

        Es muy común en la palabra que se diga cuantas personas había. Había ciento veinte almas. Eso no significa que había ciento veinte seres espirituales, extraños, transparentes y volátiles, sino que el término alma en la Biblia, siempre está vinculado a todo lo que es la persona.

        (Génesis 46: 27) = Y los hijos de José, que le nacieron en Egipto, dos personas. Todas las personas de la casa de Jacob, que entraron en Egipto, fueron setenta.

        Fueron setenta. Sin embargo, en el original, aquí no dice setenta personas, dice almas. Almas o personas tienen la misma relación en la palabra. Veamos: ¿Por qué se genera esto? Porque en el alma está toda la personalidad. Esa es la realidad.

        Lo más visible de una persona no es sólo su cuerpo, es su alma, porque allí está su carácter, su manera de hablar, su manera de pensar, sus hábitos, todo está en el alma. Encontramos algunas facultades en el alma, tales como la emoción, voluntad, pensamientos. Esto es mente.

        Vamos a revisar la voluntad. La voluntad es el instrumento de nuestras decisiones y expresa nuestro poder de elección. Expresa nuestro poder de decisión. Es importante conocer esto, porque determinados espíritus operan más sobre las emociones, otros más sobre la voluntad y otros terceros, más sobre la mente. No operan todos iguales.

        Es muy importante poder distinguir esto. ¿Qué significa la ausencia de voluntad? Que el hombre es un autómata, es un muñeco, es un robot. Ahora bien: definitivamente, quiero que sepas, entiendas y te prepares, en que el máximo propósito de Satanás, es anular la voluntad del hombre.

        Vamos a ver algunos versículos relacionados con la voluntad en el alma. No soy afecto a trabajar sobre textos sueltos, pero en este caso no se trata de tremenda revelación, sino de sustento global a un tema específico.

Salmo 27: 12) = No me abandones a la voluntad de mis enemigos; porque han levantado contra mí testigos falsos, y los que respiran crueldad. (La palabra que aquí se traduce como voluntad, es la palabra Nefesh, que significa Alma.)

        (Salmo 41: 2) = Jehová lo guardará, y le dará vida; será bienaventurado en la tierra, y no lo entregarás a la voluntad (Alma) de sus enemigos.

        (Ezequiel 16: 27) = Por tanto, he aquí que yo extendí contra ti mi mano, y disminuí tu provisión ordinaria, y te entregué a la voluntad (Alma) de las hijas de los filisteos, que te aborrecen, las cuales se avergüenzan de tu camino deshonesto.

         (Salmo 35: 25) = No digan en su corazón: ¡Ea, alma nuestra! No digan: ¡La hemos devorado! (Corazón, en hebreo, es alma.)

        Mucha gente es atada por sus palabras. Debemos tener mucho cuidado con lo que prometemos. Jesús nos dijo: su sí, sea sí, su no, sea no; punto. En Números 14 hay un relato en el que Dios se enoja profundamente y concluye diciendo, verso 28: Vivo yo, dice Jehová, que según  habéis hablado a mis oídos, así haré yo con vosotros. Lo que ellos dijeron, eso se les volvió en su contra.

        (1 Crónicas 22: 19) = Poned, pues, ahora vuestros corazones (almas) y vuestros ánimos(alma) en buscar a Jehová vuestro Dios; y levantaos, y edificad el santuario de Jehová Dios, para traer el arca del pacto de Jehová, y los utensilios consagrados a Dios, a la casa edificada al nombre de Jehová.(El Señor nunca nos obliga a servirlo.)

         (Job 6: 7) = Las cosas que mi alma no quería tocar, son ahora mi alimento.(¿Qué parte de su alma no quería tocar esas cosas? Su voluntad. Alma)

        (Job 7: 15) = Y así mi alma tuvo por mejor la estrangulación, y quiso la muerte más que mis huesos.(¡Huau, Job!)

        En los versículos que hemos revisado, encontramos lo siguiente. Aquí voluntad o corazón, señalan a la voluntad humana. Disponer el corazón, alzar su alma, negarse, preferir, son todas actividades de la voluntad humana, y tienen su origen en el alma.

        Cuando oímos decir, o lo leemos, o nosotros mismos decimos que debemos disponer nuestro corazón, estamos hablando de algo directamente relacionado con nuestra voluntad. A mucha gente, esto le va a servir para liberación. Porque mucha gente, en su corazón, quiere hacer cosas, pero le falta la voluntad para hacerlas.

        Hay mucha gente en esas condiciones. Y es más: muchos de ellos saben que deben hacerlas, pero no las hacen. ¿Por qué? ¿Qué es lo que falta allí? Ustedes van a darse cuenta que no es toda la gente la que necesita liberación, hay gente que necesita cambiar de hábitos.

        No es con buenos deseos que somos perfeccionados, sino con voluntad. La voluntad nos hace poder alcanzar los sueños que Dios nos da. Dios puede darte muchos sueños, pero si tú no tienes la voluntad para alcanzarlos, nunca los vas a ejecutar. No se trata de tener buenos deseos, se trata de vivir en eso.

        Hablemos un poco de la mente. La mente es el instrumento de nuestros pensamientos. Manifiesta nuestro poder intelectual. Es la fuente de la sabiduría, razonamiento y conocimiento. La ausencia de mente, hace a un hombre inepto. Vamos a revisar algunos versículos que están ligados alma con mente.

        (Ezequiel 24: 25) = Y tú, hijo de hombre, el día que yo arrebate a ellos su fortaleza, el gozo de su gloria, el deleite de sus ojos y el anhelo de sus almas, y también sus hijos y sus hijas. (Esto es, el anhelo de sus pensamientos)

        (Proverbios 19: 2) = El alma sin ciencia no es buena, y aquel que se apresura con los pies, peca.

        (Lamentaciones 3: 20) = Lo tendré aún en mi memoria, porque mi alma está abatida dentro de mí.

        (Proverbios 2: 10) = Cuando la sabiduría entrare en tu corazón, y la ciencia fuere grata a tu alma.

        (Proverbios 24: 14) = Así será a tu alma el conocimiento de la sabiduría; si la hallares tendrás recompensa, y al fin tu esperanza no será cortada. (La sabiduría es buena para tu alma. ¿Y para que parte de tu alma? Para tu mente).

 

        Así como la voluntad es muy interesante, porque hay gente atada en el área de la voluntad, también hay gente atada en el área de la mente. El reino de los cielos, no es algo que pueda pasar por nuestra mente. El reino de los cielos es mucho más de lo que hemos visto o entendido. La gente puede haber nacido de nuevo, pero nunca haber entrado al reino de los cielos.

        Cuando Jesús vivió en esta tierra, Él trató de mostrar con palabras y con ejemplos, quien era él, y que venía con él. ¿Qué es lo que decía? Ya lo enseñé en mi libro “En el Reino”: El reino de los cielos se ha acercado. Él habló y enseñó, pero también él manifestó el reino. Escucha lo que dije: manifestó el reino.

        ¿Qué es manifestar el reino? ¿Qué es ese reino? El reino de los cielos se ha acercado. ¿Cómo que se ha acercado? ¿Dónde está? ¿Lo puedes ver? ¿Es Él el reino? No, no es él el reino. Él es parte del reino. Con Él está el reino. ¿Pero qué es el reino? Es la dimensión en la que opera la divinidad.

        Ustedes ven a Jesús multiplicando los panes. Ustedes ven que para Dios cinco panes y dos peces, son suficientes para cinco mil personas. Esa es la aritmética del reino. Ustedes saben que para el reino no hay leyes naturales y uno puede caminar sobre el mar.

En el reino tú puedes atravesar paredes. En el reino tú estás en un lugar, ponle en Jerusalén, y el Espíritu viene, te toma y te lleva hasta que apareces hablando con un etíope eunuco, y luego el Espíritu viene, te toma y te devuelve.

        En el reino nosotros podemos encontrar una manifestación que no corresponde a patrones racionales. ¡No es racional que cinco panes alcancen para cinco mil personas! ¡Es imposible! Sí, en términos humanos, es imposible. No hay forma en que tú puedas, eso se llama milagro. ¿Y no dice la Palabra que, uno de los ministerios, es el de hacer milagros?

        Entonces, si ese es uno de los ministerios, eso significa que algunos de nosotros pueden tener el don de hacer milagros. Pregunto: ¿Por qué la iglesia no los hace? Porque no milita en el reino. Y no estoy hablando de sanidades. Es diferente sanidades y milagros, porque si lees la descripción que Pablo hace en Corintios, allí lees que dice que están los que hacen sanidades y los que hacen milagros, son distintos dones.

        Las sanidades tienen que ver con manifestaciones sobre el cuerpo, mientras que los milagros tienen que ver con manifestaciones sobre la materia. Que el agua se convierta en vino, es un milagro. Que el aceite de la viuda no se termine, es un milagro, tiene que ver con la materia.

        El Señor nos ha dado la autoridad para poder manifestar el reino. En el reino, un dólar no es un dólar, pueden ser cincuenta dólares, o cien, o mil. En el reino tú sabes cuánto tienes, pero metes tu mano en la cartera y sacas, sacas y sacas. Eso es el reino. O al menos una parte de él.

        La manifestación del reino es lo que la iglesia necesita para poder establecer el gobierno de Dios. La palabra de ciencia, la palabra de sabiduría, el ministerio profético, son todas manifestaciones del reino. Hoy día, tú tienes miles de personas que han nacido de nuevo, pero no por eso han entrado al reino.

        Entonces podemos ver cristianos pobres, cristianos deprimidos, cristianos en derrota, cristianos presos en cautiverio, cristianos que nunca viven lo que la Biblia dice. Cuando John Wimber se convirtió al Señor, pasó algo muy interesante. Este hombre era un ateo pragmático, es decir que era una persona que no creía en Dios por su manera de vivir.

        Después de mucho orar por parte de familiares suyos, él se convierte. Este hombre, antes de convertirse, había leído la Biblia varias veces. Cuando John Wimber va por primera vez a una iglesia, le toca una que no era precisamente cálida o bulliciosa, era más bien gélida y silenciosa.

        Al salir, (El culto duró dos horas exactas, ni un minuto más ni un segundo menos), se estaba despidiendo del pastor, y John Wimber le hizo una pregunta muy sencilla: “Pastor; ¿Qué día, aquí, son las reuniones en que pasan las cosas que dice la Biblia?

        El pastor le respondió que las reuniones en esa iglesia eran todas como las que él había visto. “¿Eso es todo?” – Sí, señor Wimber. - ¡Pero la Biblia dice que cosas mayores veremos! ¿Nada de eso pasa aquí?” Le sobrevino una crisis tan grande a este hombre que acababa de nacer que casi se va al suelo.

        Tardó meses para buscar congregarse, hasta que Dios le habló y le explicó la situación. Pero él pensaba que venir a la iglesia, era venir a vivir esto que está aquí, en mi Biblia, en la tuya, en todas. Esta sobrenaturalidad. Él pensaba que entraba y el poder maravilloso de Dios se iba a manifestar en toda su dimensión.

        Pero resultó ser que cayó en un museo. Este John Wimber sería, a la larga, uno de los fundadores de los profetas de Kansas. Un hombre muy usado por Dios que ha desarrollado un ministerio muy interesante.  Simplemente porque le creyó a Dios de que mayores cosas harán en mi nombre.

        No obstante, déjame decirte que de esos museos similares a los que cayó Wimber, hoy hay a montones. Es más: son tremenda mayoría. A mí me gustaría mucho que alguien de los que ingresan a mi Web me escribiera para contarme las maravillas que pasan en los sitios donde se congregan, pero no. Me llaman para contarme exactamente lo contrario.

        Quiero que entiendas esto: cuando cualquiera de ustedes sienten un problema, un dolor de cabeza, el pensamiento intuitivo de tu mente, es: ¿Dónde hay una farmacia? Sale como una respuesta automática, y ¿Sabes de dónde sale? No sale de tu voluntad ni de tus emociones, sale de tu mente.

        O sea que es mucho más fácil irte a comprar una aspirina que buscar al Señor en una sanidad. Es una programación que tenemos en nuestro disco duro cerebral. Tenemos las mentes programadas, y muchos lo sufren porque hace años que no realizan un service.

        Si tú quieres presenciar cambios reales dentro de lo que es la industria tecnológica mundial, mira con atención el área informática, es donde más han proliferado. Si tú no te actualizas, tu equipo deja de prestar servicio útil en cinco años. Bien: hay hermanos en la iglesia que jamás se han actualizado. Tú te imaginas el resto.

        Pero no estoy hablando solamente de hermanitos calienta bancos, hay líderes de cierto prestigio que están en las mismas condiciones. Y son los encargados de llevar al pueblo a dimensiones de Dios siguientes.

        Estar viviendo en el espíritu es igual que estar conectado a una banda ancha de internet de buena calidad. Te permite estar totalmente al día de lo que Dios está haciendo aquí o a cincuenta mil kilómetros. Eso yo puedo comprobarlo y probarlo con los correos que recibo de distintos lugares del planeta. ¿Puede ser que con tanta distancia por medio, esa persona y yo pensemos y creamos igual? Sí, puede ser. El Espíritu Santo que nos guía a toda verdad, sigue siendo uno solo, Y no se contradice.

        ¡Pero hermano! ¿Y entonces por qué tenemos tantas doctrinas distintas? Ese es el hombre y su religión, nada que ver con Dios. Porque el problema de la gente, es su mente. Pablo nos lo explica y dice: poderosas son las armas para la destrucción de fortalezas, llevando cautivo todo pensamiento. Hermano: las fortalezas más grandes no son las que están en la Isla de Pascua o las aztecas. Las fortalezas más grandes están en  la cabeza de la gente. “En Medio de tus Orejas”, ¿Recuerdas ese estudio? Búscalo.

        Si tú dices no puedo, hasta allí llegamos. Hay una relación muy estrecha entre la fe y la mente. Conforme a tu fe, sea hechoTe pregunto: ¿Tú crees que la fe es racional? No. No lo es. ¿Cómo va a ser algo racional lo que la misma Biblia define como Certeza de lo que se espera, convicción de lo que no se ve? Te doy un ejemplo: cuando tú ves a Pablo llegando a Atenas, le pasa algo muy interesante.

        ¿Tú sabes que Pablo fracasó en cierta ocasión? Llega a Atenas, y el espíritu de Atenea lo toma. Dice que él es llevado al areópago. ¿Sabes lo que es el areópago? El templo de Atenas. Y le dijeron: bien; ahora predícanos. ¿Qué son esas cosas interesantes que dices?

        Porque en Atenas nadie tenía otro interés que no fuera el de hablar y enterarse de las cosas. Y Pablo, entonces, se pone a filosofar. Les dice: veo por todas partes que ustedes son muy religiosos. ¿Tú lo ves a Pablo diciéndoles halagos a los incrédulos? No. Ese no era el carácter de Pablo. Pablo era espada. Y muy aguda y afilada.

        Y dice que empieza a explicarles: yo predico al Dios desconocido. Y dice que la gente lo llama charlatán, palabrero. Y es sacado prácticamente a empujones, y que muy pocos recibieron al Señor, un fracaso. De ahí se va a Corinto. ¿Y sabes que dice la carta a los Corintios? Ninguna cosa más pretendo que saber una; a Cristo, y a éste crucificado. Porque he venido aquí no con persuasión humana, sino con manifestaciones de poder.

        ¿Sabes qué? ¡A eso lo aprendió en Atenas, avergonzado porque no había podido convertir a nadie! Entonces llegó a Corinto con otra visión. Esto, es locura para el que no quiere creer. La predicación es locura. Él lo aprendió de su propia experiencia. Hay espíritus que operan sobre la mente. Y no estoy hablando de mente mundana, ni lo sueñes.

        Entonces yo digo que hoy, hay algo que nos impide ver el reino. Y ese algo, es la mente. Nuestra mente es una máquina que nunca deja de hacer ruido. Tú estás oyendo esto y, al mismo tiempo, tu mente está pensando a enorme velocidad. No sólo en lo que yo digo, sino en por lo menos una docena de cosas más. Todo al mismo tiempo. ¿Concentración?

        Bien; debo informarte que ese es el problema por el cual te cuesta enorme trabajo escuchar la voz de Dios: tu mente hace demasiado ruido. Una de las disciplinas de los verdaderos hombres de Dios, es hacer callar su mente. Mente: te desconecto. Clac.

        Es muy importante que podamos ver con claridad el enorme poder que tiene la mente sobre la conducta del hombre. Alguien dijo alguna vez: siembra un pensamiento y cosecharás una acción. Siembra una acción y cosecharás un hábito. Siembra un hábito y cosecharás una vida.

        Todo pecado empieza en el pensamiento. Por eso, lo que más ha corrompido Satanás, es el pensamiento. Aquí el conocimiento, en los versos que hemos visto, existe como actividad del intelecto o la mente del hombre, lo cual la Biblia nos dice que proviene del alma. Nuestra alma expresa su identidad, su personalidad, a través de los pensamientos.

        Tercer componente u órgano del alma: las emociones. ¿Qué son las emociones? A través de esta función podemos expresar amor, odio, tristeza, etc. Podemos sentirnos alegres, enojados, tristes, felices. La ausencia de la emoción, en el hombre, provoca un hombre insensible.

        Hermano: ¿Hay un lugar para las emociones en la vida del hombre de Dios? Sí. En una reunión, tal vez, pero no podemos tener cultos emocionales. Uno de los más claros ejemplos al respecto, es la alabanza. Todos sabemos que no toda  música que se oye y se canta en la iglesia proviene de Dios. Hay mucha música que proviene del hombre. Y la música del hombre lleva al hombre al hombre. Pero la música de Dios, lleva al hombre a Dios.

        Dios les mostrará que hay notas y canciones que afectan más el alma del hombre que su espíritu. Las emociones están presentes, no son negativas; pero son malas cuando las emociones nos hacen decidir. Si tú decides por lo que sientes, estamos en un problema. Tú no debes decidir por lo que sientes, tú debes decidir por lo que sabes que es correcto. Veamos ahora algunos versículos que tienen que ver con emoción.

        (1 Samuel 18: 1) = Aconteció que cuando él hubo acabado de hablar con Saúl, el alma de Jonatán quedó ligada con la de David, y lo amó Jonatán como a sí mismo.

        (Cantares 1: 7) = Hazme saber, oh tú, a quien ama mi alma, donde apacientas, donde sesteas al mediodía; Pues ¿Por qué había de estar yo como errante junto a los rebaños de tus compañeros?(¿Qué parte del alma es la que ama? Las emociones.)

        (Lucas 1: 46) = Entonces María dijo: engrandece mi alma al Señor.

         (Zacarías 11: 8) = Y destruí a tres pastores en un mes; pues mi alma se impacientó contra ellos, y también el alma de ellos me aborreció a mí.

        (Deuteronomio 6: 5) = Y amarás a Jehová tú Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.

         (Salmo 107: 18) = Su alma abominó todo alimento, y llegaron hasta las puertas de la muerte.

        Entonces, ¿El alma expresa emoción? Sí señor. ¿Podrá el espíritu expresar emoción? Esta es una pregunta casi de laboratorio, ¿No es cierto? Vamos a ver. ¿Podrá el espíritu pensar? Sí, pero se llama discernimiento. No es conocimiento, porque el espíritu no conoce, el espíritu discierne. El alma no discierne, conoce. Esto es clave.

        La emoción en el alma a nivel de deseo. (Deuteronomio 14: 26) = Y darás dinero por todo lo que deseas, por vacas, por ovejas, por vino, por sidra, o por cualquier cosa que tú deseares; y comerás allí delante de Jehová tu Dios, y te alegrarás tú y tu familia.(El alma desea. Esto está más que claro. ¿Algo para añadir? Sí; en mucho cuidado con los deseos de tu alma.)

         (Salmo 42: 1) = Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma mía. Un alma que clama es un alma que anhela. ¿Y qué parte de tu alma clama o anhela? Tu emoción.)

         (Mateo 12: 18) = He aquí mi siervo, a quien he escogido; mi amado, en quien se agrada mi alma; pondré mi espíritu sobre él y a los gentiles anunciará juicio.

        Esto último tiene que ver con Jesús, claro. ¿Tú sabes que la persona más feliz que ha vivido en el planeta fue Jesús? ¿Lo puedes ver así o te quedas viéndolo como les encanta presentarlo a los demonios, todo sangrante y con cara de sufrir, sufrir y nada más que sufrir? Él era feliz. Dice que por el gozo puesto delante de él fue a la cruz. ¡Mujeres! ¿Por qué lloran? ¡Lloren por sus hijos!  La emoción en el alma, sensaciones y sentimientos.

        (Lucas 2: 35) = (Y una espada traspasará tu misma alma), para que sean revelados los pensamientos de muchos corazones.(Esto se lo dicen a María. Una espada traspasando su corazón. ¿En qué parte de su alma? En sus emociones)

        (1 Samuel 30: 6) = Y David se angustió mucho, porque el pueblo hablaba de apedrearlo, pues todo el pueblo estaba en amargura de alma, cada uno por sus hijos y por sus hijas; mas David se fortaleció en Jehová su Dios.

        (2 Reyes 4: 27) = Luego que llegó a donde estaba el varón de Dios en el monte, se asió de sus pies. Y se acercó Giezi para quitarla; pero el varón de Dios le dijo: déjala, porque su alma está en amargura, y Jehová me ha encubierto el motivo, y no me lo ha revelado.

        ¿Alguna vez te has encontrado con algún hombre o alguna mujer con el alma amargada? ¡Dios te libre! Pablo nos advierte de ellos. Dice que tengamos cuidado con ellos, que no sea que brotando una raíz de amargura contamine a muchos. Eso es transferencia de espíritus, o como se llame en tu iglesia.  ¿Quién invita a un amargado a su fiesta de cumpleaños?

         (Job 19: 2) = ¿Hasta cuándo angustiaréis mi alma, y me moleréis con palabras?

         (Salmo 86: 4) = Alegra el alma de tu siervo, porque a ti, oh Señor, levanto mi alma.

         (Salmo 42: 5)  ¿Por qué te abates, oh alma mía, y te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, salvación mía y Dios mío. (Esta es una muy buen pregunta que tú puedes hacerle a tu alma, uno de esos días en que tu pie no quiere salir de la cama por la mañana)

         (Proverbios 16: 24) = Panal de miel son los dichos suaves; suavidad al alma y medicina para los huesos.

        (Isaías 55: 2) = ¿Por qué gastáis el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? Oídme atentamente, y comed del bien, y se deleitará vuestra alma con grosura. (Grosura significaba provisión, era la grosura del sacrificio. Nada que ver con tu obesidad)

         (Mateo 26: 38) = Entonces Jesús les dijo: mi alma está muy triste, hasta la muerte; quedaos aquí, y velad conmigo.

        (Juan 12: 27) = Ahora está turbada mi alma; ¿Y qué diré? ¿Padre, sálvame de esta hora? Mas para esto ha llegado esta hora.

        Jesús, un día se quejó de esto, ¿Te acuerdas? Mi alma está triste. En otra parte de Juan, dice: mi alma está inquieta. Y en otra versión, dice: preocupada. Esas son las emociones. Y tal como lo digo en otro trabajo sobre este mismo tema, las emociones son peligrosas.

        Bien; hemos visto versículos que apoyan el pensamiento del alma, las emociones del alma y la voluntad del alma. Ahora vamos a tratar de entender esto. Cuando hablamos de la vida del alma, me estoy refiriendo a lo siguiente.

        En la lengua griega, hay tres palabras principales para nuestra palabra Vida. La primera palabra, es Bios.De esa palabra se deriva medio de vida, sustento o biología. Habla de la vida orgánica, de la vida natural, de la vida más incipiente, primitiva. La vida de una planta es vida Bios. Lo mismo es la vida de un animal.

 

        El segundo nivel de vida, más elevado, es Psiche, o como lo pronunciamos, Psique, y significa vida animada, natural o del alma. La vida superior se llama Zoe. Esto es: vida eterna, elevada o del espíritu. Cada parte que Jesús habló de la vida estuvo bien definida.

        Y esta es la vida eterna, que te conozcan a ti, por ejemplo, habla utilizando la palabra Zoe. Este vocablo significa vida espiritual, vida de calidad. La palabra Psiche, en cambio, habla de la vida anímica, vida del alma. Entonces, nos encontramos con personas que son más Bios, otras que son más Psiche y otras que son más Zoe.

        ¿Tú tienes vida Bios? ¡Claro! Si no estarías con cuatro velas y una enorme campera o abrigo de madera! ¿Tienes vida Psiche? ¡Claro! De algún lugar de ti salen las emociones, los deseos de esto o aquello. O sea: las preocupaciones. Eso sale de alguna parte, pero no es cuerpo ni espíritu. ¿Tienes vida Zoe? ¡Claro! ¿Por qué te deleitas en la alabanza, leyendo la palabra o en cualquier cosa relacionada con las cosas de Dios? Eso no nace del alma, nace de tu espíritu, Zoe.

        Para Alma, en cambio, existen dos palabras; una en el Antiguo y otra en el Nuevo Testamento. La primera palabra, en el Antiguo Testamento, es Nefesh, que se traduce como alma o vida del alma. La segunda palabra en el Nuevo Testamento, es Psiches, de allí viene psicología. Alma como vida del alma, también; pero esta vez en griego. La anterior era en hebreo.

        Resumiendo un poco, en la Biblia, la palabra alma, está ligada a la vida del hombre. A su vida natural. Vida natural, vida del hombre, eso es alma. Ahora bien; ¿Por qué está prohibido en la Biblia, tomar sangre? ¿Por qué era necesario que Jesús derrame toda su sangre en la cruz? Ahora lo va a poder entender.

        (Génesis 9: 4) = Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis.

        Esta explicación es muy clara. ¿Qué parte del ser, ya sea del animal o del hombre, expresa más la vida? La sangre. Y aquí dice que no comamos carne con su sangre. Y es notable, porque este es un mandamiento que Pablo va a repetir en el Nuevo Testamento.

        Pablo les ordena a los hermanos que no coman carne con su sangre. Eso en el Nuevo Testamento. Eso es ya después de Cristo. Porque tomar la sangre significaba, tomar la vida. Es decir: homicidio. ¿Qué dice en Levítico 17:11?Porque la vida de la carne en la sangre está, y yo os la he dado para hacer expiación sobre el altar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la persona.

         En la Biblia se nos pide que busquemos almas, ¿Recuerdas? ¿Cuánto dará un hombre por su alma?, dice. En otro lugar dice que el que quiera ganar su alma, la perderá. ¿Está hablando de su vida? Sí, en otra versión dice vida y alma. Son sinónimos.

        (Hechos 20: 24) = Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.

       (Mateo 20: 28) = Como, el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.

        Bien; ¿Estamos en claro que hay directa relación entre vida y alma? Sí. ¿Y entre vida y sangre? También. Por esa razón es que los pactos de sangre son tan duros; están vinculados a la vida. Es mucho más que una simple promesa. Hay una señal profética de vida. Es muy fuerte eso.

        Hagamos un resumen, concretemos. Un hombre sin alma, no vive. Cuando el alma se separa del cuerpo, se llama muerte. La Biblia nunca nos dice que el hombre natural posea otra vida que no sea la del alma. Por favor; piensa en lo que acabo de decirte. La Biblia nunca nos dice que el hombre natural posea otra vida que no sea la vida del alma.

        La vida del hombre sólo es la vida del alma que impregna el cuerpo. La vida, entonces, viene a ser el fenómeno del alma. El cuerpo presente, es considerado como un cuerpo anímico. Lee con  atención 1 Corintios 15: 44: Se siembra cuerpo animal, resucitará cuerpo espiritual. Hay cuerpo animal, y hay cuerpo espiritual.

        Esto quiere decir que el cuerpo presente, ese que tú tienes ahora, es llamado cuerpo anímico. Este cuerpo no puede heredar el reino venidero, tiene que ser transformado o glorificado. Ahora bien; el patrón del alma, está muy vinculado a eso.

        Veamos: el alma, esto es: la mente, las emociones, la voluntad, expresa todo lo que es una persona. Esto es: su personalidad misma. Hay dos voluntades que están peleando en el corazón del hombre. La voluntad que viene de su espíritu, y la voluntad que viene de su alma. Pablo decía en Romanos que no hacía todo el bien que quería, sino que hacía el mal que no quería hacer,

        ¿Y de dónde nace esto? Esto nace del YO. ¿Y qué cosa es el YO? Ex complejo para explicarlo, pero quisiera darte un panorama íntegro del tema y no con algo que concuerde aunque sea fuera del contexto. No es mi estilo

        (Números 30: 2) = Cuando alguno hiciere voto a Jehová, o hiciere juramento ligando su alma con obligación, no quebrantará su palabra; hará conforme a todo lo que salió de su boca.

        Esto que has oído, es una introducción a un área de contaminación que desgraciadamente es muy común. Hay gente que se ha atado a algo o a alguien voluntariamente. Y su alma ha quedado ligada a ese algo o a ese alguien. Ejemplo típico: ¿Por qué estamos en contra del noviazgo? El noviazgo debe apuntar al matrimonio. ¿Por qué? Porque cuando tú te relacionas emocionalmente con alguien, por las palabras, te llegas a atar.

        Y es muy sencillo lo que te estoy comentando. Te habrá sucedido alguna vez o, al menos, debes conocer a un par de amigos o amigas que sí lo han vivido. Cuando tú le dices a una persona algo así como: “Yo voy a estar contigo siempre, toda la vida.” O “Yo no voy a querer a nadie más que a ti en esta tierra”, y tú tienes diecisiete o dieciocho años, y tu  mente va a cambiar mucho, y tus emociones van a  madurar, quizás lo dijiste por decir algo bonito en ese momento, pero lo que tú no sabes es que al pasar los años, un fragmento de nuestra alma queda cautiva, está ligada a algo.

        Entonces llega el momento que tú quieres casarte con alguien en serio, y a los dos meses se te acaba el amor, y ya estás casado. Entonces te dices: ¿Por qué no puedo amar a mi pareja? ¿Qué es lo que me pasa? ¿Qué es lo que está mal?

        Estás en un adulterio emocional. - ¡Pero no, hermano! ¿Cómo voy a estar en adulterio emocional si yo nunca me casé antes? - ¿Ah, no, eh? ¿Y qué crees que es el matrimonio, sino un pacto de palabra? ¿Eso significa que yo me he casado antes? ¡Claro, cuando le dijiste eso a esa persona!

        ¿Y es por eso que ahora no puedo expresar eso por esta persona? Exactamente. Gran parte de los problemas emocionales que tiene la gente que llega a la iglesia o al Señor, es romper lo que sus bocas han dicho. Con lo que tu boca ha atado.

        ¿Pero entonces no atas el cuerpo? Sí, también hay ataduras del cuerpo. Cuando tú dices: ¡Ah, yo siempre me ando enfermando! Eso es una atadura al cuerpo. Pero no es ese nuestro tema. La mayor parte de las ataduras al alma. O si prefieres, del alma.

        ¿Y cómo se ata el alma? Por juramento. Cuando ustedes ven en la palabra, el YO opera a partir del alma, y el alma se vincula a partir de su expresión vocal. Lo que yo digo, es lo que yo soy. El Señor sabía esto. Y sino fíjate en el versículo once del capítulo treinta y cinco del libro de Números, dice que el que mata alguna persona sin intención, Dios le da un camino de salida. Claro está, sólo en caso de una muerte accidental.

        Él puede hacerlo sin temor a equivocarse, el conoce al YO del hombre. El conoce la motivación que hay en cada acto nuestro. Cuando ustedes analizan los versos de la palabra, se puede percibir algo. Nuestra mente elabora una serie de estructuras que determinan nuestra dirección de vida.

        Hay gente que ha sido atada a las palabras de maldición de sus propios padres. “¡Tú nunca vas a poder ser feliz!” “¡Tú siempre serás una persona desdichada!”, “¡Tú nunca vas a prosperar!” Eso no afecta tanto el cuerpo como al alma. El alma sí es ligada.

        A mí me gusta ver lo que dicen las primeras palabras de Amós 6:8. Allí se lee que: Jehová el Señor juró por sí mismo. Literalmente, en ese texto dice que juró por su alma. Y fíjate que me impresiona mucho eso, porque Dios prohíbe los juramentos. 

        Y más, todavía: el alma es vital en todo esto porque el alma expresa vida. Y si Jesús dice que no juremos ni por un cabello, sus buenos motivos han tenido para advertirnos. Imagínate ahora lo que implica que Dios jure por su alma en algo. Sería bueno que alguien se lo dijera a los funcionarios que juran sus cargos sobre biblias.

        Y eso está en relación con nosotros. Se pueden ver algunos preciosos patrones de Dios que tienen que ver con nosotros. ¿Él se ha comprometido por qué? Por palabras. Yo te he dicho: nunca te dejaré, nunca te abandonaré. Has recibido con un gran amén esa palabra?

        Dios ha hecho voto con nosotros. Que mi diestra pierda su destreza si me olvido de ti, Jerusalén. Ese es un juramento. En la carta a los Romanos capítulo diez, dice cómo podemos ser salvos. Si confesares con tu boca y creyeres con tu corazón. El alma es el propio YO del hombre.

        En la Primera Carta de Pedro, se intercala de la misma manera, personas como almas. Lee conmigo Mateo 16:26: Porque, ¿Qué aprovechará al hombre, si ganare a todo el mundo, y perdiere su alma? ¿O que recompensa dará el hombre por su alma?

        Pero mira lo que dice en paralelo, y hablando del mismo tema, en Lucas 9:25. Pues, ¿Qué aprovecha al hombre, si gana a todo el mundo, y se destruye o se pierde a sí mismo?(Creo que está más que claro. Alma, persona, sí mismo).

        ¿Por qué le estoy dando tanta vuelta a esto? Hermano: el punto clave de la liberación no consiste solamente en sacar espíritus malos. Gran parte de la liberación es restaurar el alma. Cuando el dardo de Satanás entra en lo profundo de un alma, y tú lo sacas, tanto a la entrada como a la salida desgarra el alma en diferentes dimensiones.

        El gran error de la liberación por muchos años, ha sido pensar que el eje central de una liberación es sacar demonios a diestra y siniestra, y que todo concluye allí. Pero esa es una parte solamente del proceso de restauración. Por eso no me gusta utilizar demasiado esa palabra, liberación. La palabra que en apariencia es más adecuada, es limpieza.

        Porque no trata solamente de sacar algo que no debería estar allí, sino de dejar el lugar adecuado, limpio, restaurado. Nadie debe suponer que este problema se resuelve solamente sacando el espíritu malo del hombre. Tiene que ser sanada su alma.

        Esa es la parte complicada. ¿Y cómo vamos a poder sanar? Te doy un ejemplo: si tú has descubierto que este espíritu está operando sobre la mente de la persona, te doy una pauta muy sencilla. Alguien que ha estado metido en Nueva Era, llámese meditación trascendental, llámese yoga, o lo que fuera. Sale el espíritu controlador de la mente, ¡Fantástico!  ¿Allí termina todo? No.

        Esa persona necesita ser asistida con urgencia, pero ¿En qué? En su voluntad. En sus emociones, no. En su alma. El alma de esta persona era el terreno que el enemigo dominaba. Entonces tú estás orando por esta persona, al principio, cuando el espíritu todavía estaba allí, y cuando esos espíritus de control mental están activos, lo primero que hace es desmayar a la persona.

        Entonces, en esas grandes iglesias, donde las personas pasan al frente, son ministradas y muchas caen al piso, muchos piensan que ha sido el Espíritu Santo que los tomó a todos, pero no han sido todos tomados por el Espíritu Santo, sino que muchos han sido derribados por espíritus de control mental, que lo que hacen es desenchufar a la persona. ¿Y para qué? Para no ser identificados.

        ¿Y cómo se distingue si cayó por el Espíritu de Dios o por un espíritu malo? El Espíritu de Dios, nunca deja inconsciente a nadie. Puede que esté tumbado en el piso, pero la persona que está en el piso, percibe el entorno, sabe lo que ocurre a su alrededor, está consciente de lo que está viviendo.

        Nunca se va a levantar y va a decir: ¿Qué me pasó? ¡No recuerdo nada! ¡El Señor me tocó! ¿El Señor? ¿Qué señor? ¡El Señor no es eso, hermano! No podemos caer en un trance, eso no es Dios. Esa persona, muy probablemente tenga una ligadura con espíritus de control mental.

        Entonces, la primera batalla para sacar al espíritu malo, es como la ministro sin que la persona se me desmaye, considerando que el demonio domina su mente. Eso quiere decir que mi primera batalla es en el área de la mente. Yo tengo que agarrar su mente para que no se me arroje al piso.

        Una vez que tengo eso, es más fácil. La segunda etapa es como fortalezco su mente, para que no caiga en yugo otra vez. Recuerda que si no ponemos algo allí, siete peores vienen. Por eso es que decimos que las liberaciones masivas son peligrosas.

        Porque si tenemos un montón de gente moviéndose aquí y los espíritus malos salen de ellos cuando se les ordena hacerlo, ¿Quién realiza un seguimiento específico para ver si el estado posterior de esta gente no es peor que el anterior? El primero. Se aconseja esencialmente ministraciones personales. Y si hay mucha gente, pongan gente para que cada uno sea atendido individualmente. Eso es un servicio, no cantar alegres coritos.

        Te doy un segundo ejemplo: La mayor parte de los varones tienen un problema: mente difusa, se llama. Y consiste en pensar desordenadamente. En cambio en las mujeres, la mente difusa no existe en ese nivel. Sí en otro, fantasear. Son patrones normales.

        Uno de los problemas más grandes que tienen los cristianos, es que sus mentes pasan mucho tiempo ociosas. Por eso es conveniente refugiarnos en la palabra. La Palabra nunca vuelve vacía. La Biblia nos ayuda a ordenar nuestra mente. No toleren que sus pensamientos estén sin control.

        Tu mente es como un jardín. Alguien puede entrar y plantar lo que quiera. Ahí es donde debemos poner a un buen jardinero, un jardinero cuidador. Si no conoce ninguno, le doy el nombre: Espíritu Santo. ¿Sabías tú que la gran cantidad de adicciones, pornografía, homosexualismo, tienen normalmente este patrón, gente que nunca gobernó sus pensamientos?

        ¿Por qué la pornografía es tan dañina? Porque le transmite imágenes a la mente. Y las deja guardadas. Y cuando ya la película ha terminado, tú todavía retienes esas imágenes en tu cabeza. ¿Sabes qué pasó? Entró un ladrón y te metió algunos espinos en tu jardín. Entras alegremente a buscar la mejor flor para tu florero y te desgarras con espinos la piel y la ropa. ¿Pero qué pasó? Ayer, la película…

        Entonces todo pasa por tus decisiones, que es como decir por tu voluntad. El Espíritu Santo no puede por sí solo con eso. ¿Por qué? Porque Él no impone, tiene que haber un ceder de tu voluntad. ¿Qué dice             Génesis 6: 3?Dice: Y dijo Jehová: no contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; mas serán sus días ciento veinte años.        

        Mira que duro es Dios con esto. Es que el hombre ha caído tan bajo que ya no es espíritu, ahora es carne. Y se corta toda esa generación, mira que tremendo. Dios dice que su Espíritu no peleará ni contenderá con él.  Eso implica algo de lo que hablábamos antes. Carne es alma más vida física.

        El alma, ha sustituido la autoridad del espíritu. Hoy día, aún la búsqueda de la voluntad de Dios se hace mediante la voluntad humana. Cantares, el libro, te da una pista de como debes hacer para poder entrar a las cámaras del rey. Tipología pura. Dios es rey. Una premisa fundamental: ¡Búscalo!

        Por las noches busqué, no lo hallé; caminé por las plazas, no estaba, caminé por las calles, no estaba; me golpearon los guardias de la ciudad, no lo encontré. ¿Cómo descubro adonde está el Señor? ¿Cómo logro tener intimidad con Él? En secreto, atráeme; en pos de ti, correremos.

        No hay manera que tú puedas buscar a Dios con tu intelecto. ¿Adónde lo vas a encontrar, te vas a volver loco! ¿Cuánta gente ha perdido la brújula buscando a Dios con su propio entendimiento? No es del que quiere ni del que puede, es del que Dios tiene misericordia. Atráeme, ese el diseño. Si tú me atraes, yo sé que puedo llegar. Sólo así puedo.

        (1 Corintios 15: 47) = El primer hombre es de la tierra, terrenal; el segundo hombre, que es el Señor, es del cielo.

        (1 Corintios 2: 14) = Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.

        Sin embargo, aunque este espíritu humano esté muerto para Dios, aquí puede permanecer activo. En algunas ocasiones, el espíritu de un hombre caído, puede ser más fuerte que su alma y su cuerpo, y puede conseguir dominar sobre todo el ser.

        Estas personas se alían con el mundo espiritual demoníaco. Y son los que luego vemos operar como magos, hechiceros o brujos. Hay gente en este mundo que puede hacer cosas sorprendentes, pero no con poder del Espíritu Santo, sino con poder de espíritus demoníacos.

        O sea que ellos han aliado sus espíritus con los gobernadores del segundo cielo. También el hombre caído puede ser controlado por el cuerpo. Como el cuerpo de pecado abunda de pasiones y pecados, el hombre puede cometer los pecados más espantosos.

        El hombre está hecho del polvo de la tierra, y por tendencia natural se proyecta hacia la tierra. Hay etapas donde el cuerpo, manejado por fuerzas malignas, puede hacer cosas espantosas. Las violaciones a niños pequeños, a bebés incluso. ¿Cómo entender tamaña barbaridad sino lo vemos desde lo espiritual?

        Hay hombres, caídos, claro, en los que el alma puede ser muy fuerte, el espíritu puede ser muy fuerte y el cuerpo puede ser muy fuerte. No creyentes, ¿Estamos? Cuando el espíritu es muy fuerte, se alía. Y ahí tienes a los magos, los hechiceros, los adivinos, los chamanes, que pueden tener mucho poder. Y es un poder espiritual. Su espíritu está activo, pero no vivo. Activo por influencia demoníaca. Y en otros es el alma la que está activa y en otros el cuerpo.

        La degradación se vuelve corporal, porque el cuerpo que es el más bajo, asciende hasta tomar el control. Es el caso de las personas que cometen abusos, sus cuerpos ya los dominan. Para eso es el Espíritu, para controlar el alma y ésta, a su vez, controlar el cuerpo. Cuando este orden se invierte, se producen los desastres.

Romanos 5: 12) = Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuantos todos pecaron. (La versión original dice: pasó por todos los hombres)

        Jesús vino y tomó naturaleza humana, (Alma), para ser juzgado en lugar del hombre, y como consecuencia:(Juan 5: 24) = De cierto, de cierto os digo: el que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.

        (Hebreos 7: 9-10) = Y por decirlo así, en Abraham pagó el diezmo también Leví, que recibe los diezmos.(Veamos: Abraham le dio los diezmos del botín a Melquisedec, pero aquí dice que también Leví. ¡Pero Leví aún no había nacido! ¡Leví es uno de los hijos de Jacob! ¿Cómo es esto?) Porque aún estaba en los lomos de su padre cuando Melquisedec le salió al encuentro.(Ah, ¿Y quién estaba en los lomos de su padre cuando pasó todo eso? Leví. ¿Y qué cosa son los lomos de su padre?)

        Toda la humanidad estaba en los lomos de Adán. Jesús está orando y le dice al Padre: “Padre, de los que me diste, ninguno se perdió. Tuyos eran, y me los diste. Y han creído en tu nombre, y han conocido que verdaderamente salí de ti. No se han perdido.”

        No voy a meterme en ese tema, pero te digo algo: en los lomos de adán, estábamos todos. Entonces, cuando tú te pones delante del Señor y dices: ¡Ah! ¡Por culpa del pecado de Adán estoy aquí! No. Entiende: ese fue TU pecado también.

        ¡Pero es que yo no hice nada, hermano! Cierto, pero es que estabas en los lomos. ¿No sabías que tu nombre estaba escrito desde antes de la fundación del mundo? Yo he preparado caminos, antes de la fundación del mundo, para que tú anduvieses por ellos. ¿Está bien? Yo te conocí antes de que fueses formado en el vientre de tu madre.

          Si tú entiendes que nacer a la vida es desde el momento de la concepción, debo decirte que estás equivocado. Jesús fue juzgado en el calvario y su alma tuvo que padecer, y el peso de la ley fue tan duro con él, que nunca, nunca antes hubo tanto dolor para alguien.

        Él fue traspasado en sus manos y sus pies: las acciones del hombre, los pasos que da. Es impresionante ver cómo, cada sufrimiento que Jesús pasó, correspondía a castigar algo. Por ejemplo, él fue azotado, y los azotes se daban por diferentes causas. No se los quería matar a los azotados. Se los azotaba en cuarenta azotes menos uno. Treinta y nueve.

        ¿Sabes por qué venía el azote? Padre que disciplina a su hijo. Y estaba hablando de algo muy poderoso. El pueblo de Israel no quiso entrar, y por cuarenta años no pudo entrar a Canaán, por desobediencia. O sea que Jesús estaba siendo golpeado por nuestra desobediencia.

        Fue desgarrado de sus ropas, su cubierta de santidad. Él fue privado de alimentos. En este caso fue traspasado en sus manos y sus pies y dice: ¿Con qué me presentaré? Manos limpias. Te habla de hechos, te habla de actitudes y de los pasos que te han dirigido. Vean lo que significa tus pies o tus pasos en el libro de los Proverbios.

        Jesús fue clavado, allí. Y sus pies, o sea sus acciones y sus decisiones estaban siendo juzgadas. Dice que la lengua se le ha pegado a la boca, (Salmo 22:15, ¿Recuerdas), ¿Qué sale de su boca? Palabras. ¿Pecamos a Dios con palabras?

        Todos los presos tenían la oportunidad de beber. Les daban un adormecedor en base a mirra, pero Él lo rehusó. Él quería morir consciente. No quería ese narcótico que lo dejaría atontado. Como si estuviera drogado, anestesiado. ¿Estás entendiendo algo más de la cruz?

        Él debía recibir vino, pero recibió vinagre. La alegría del hombre era el vino. El recibió vinagre, la parte más amarga, o ácida. Él fue coronado con espinas. Nunca se había coronado con espinas a un preso que moría en la cruz, nunca. El orgullo.

        Porque las espinas son señal de maldición. La tierra te producirá abrojos y espinas, ¿Recuerdas? ¿Dónde lo tienes ahora? En tu frente. Esa es tu corona, tu maldición. Su costado fue traspasado. Estuvo seis horas en la cruz, desde las nueve de la mañana hasta las tres de la tarde. Seis, número de juicio, de imperfección.

        Sólo al final Él nos da la palabra de liberación más fuerte que el hombre haya podido escuchar. Todo está consumado. ¿Qué quiere decir? Que todo está pagado. No debo nada. ¿Jesús? No, yo. No debo nada. Y también tú. ¿Lo crees? ¿Lo aceptas?

        Es notable, porque quizás tú nunca hayas visto una cruz, pero debo decirte que con relación a tu vida, en ese momento, todo en el cielo cayó, todo cayó. Había un silencio terrible. Los ángeles decían: ¿Cómo puede ser? ¿Pero cómo puede ser?

        Veían esa nube negra sobre la cruz. Eran todos los demonios de toda la eternidad, mezclados, riéndose. Como toros enfurecidos me rodearon! ¿Esos toros eran las personas? Como toros de Basán me rodean mis enemigos. Nunca los llamó enemigos. Ni siquiera a los pecadores llamó enemigos, Jesús.

         Eran otros. La oscuridad llenó la tierra desde las doce hasta las tres. Era el espectáculo. El Hijo de Dios, el Creador, se desangraba en una cruz, con todas las señales de la maldición sobre Él. Un día vamos a estar frente a Él. Y yo no sé qué palabra podrán salir de nuestras bocas, pero lo cierto es que la cruz era nuestro lugar, no el de Él. Si tú no has visto la cruz, o no le has otorgado la importancia que tiene, es muy difícil que puedas entrar al Reino. Porque la puerta de ingreso al Reino es el sacrificio de Jesús en la cruz.

        Ahora ya lo sabes, al menos en parte. La sanidad interior o del alma no está contemplada en la Biblia porque en el plan de Dios está que tú debes ser lleno del Espíritu Santo. Y si eres lleno del Espíritu Santo, tu alma estará sujeta y marchará como corresponde.

        Hoy, el hombre cristiano está muy lejos de estar lleno del Espíritu, así es que necesita de ese tratamiento almático. No me opongo y me parece conveniente, aunque como ministro del Señor no puedo dejar de decir, una vez más, que la sanidad del alma no era lo que Dios quería, sino que anduvieras por el Espíritu y lleno de su bendita presencia.